Evitá este error que lleva a muchos emprendedores a la quiebra

Evitá este error que lleva a muchos emprendedores a la quiebra

Con cientos de métricas a las que hay que dar seguimiento, es difícil saber en cuáles centrarse para lograr un verdadero progreso en nuestro negocio. ¡Hay tantos números dando vueltas! Cada día nos enfrentamos a cifras que hablan de nuestro emprendimiento: desde los seguidores de Instagram (que a veces les damos mucha más importancia de la que merecen) hasta el número de ventas que hacemos por día, por mes y por año.

Nos abrumamos antes de empezar a analizarlos (sobre todo si consideramos que no somos tan buenos con las matemáticas). ¡No desesperéis! Hay una métrica clave para evitar perder dinero en tu empresa (y terminar en la quiebra).

¿Cuánta verdad hay en lo que escuchamos por ahí?

La mayoría de los expertos nos dicen que debemos centrarnos en...

• Ingresos / Ventas.
• Lograr un lanzamiento de 6 cifras.
• Tener un “negocio de 7 cifras”.
• Número de clics en tu sitio web.
• Aumentar el tamaño de tu lista de suscriptores.
• Aumentar tus seguidores en las redes sociales.
• Escribir el libro más popular de Amazon.

A los ojos del público, el "éxito" se ve como alguien que tiene...

• Locales a la calle.
• Varios negocios.
• Muchos colaboradores.
• Notas en revistas.

El ego a veces se deja engañar un poco por estos resultados. Pero como empresarios, no podemos permitir que los logros que vamos consiguiendo (o queremos conseguir) mareen a nuestra mente. Porque nos distraen y terminamos mirando hacia cualquier otro lado menos hacia donde tenemos que estar atentos para saber si nuestro negocio está creciendo (o no).

En el mejor de los casos, algunas de estas variables son métricas del "proceso" que nos ayudan a hacer seguimiento a nuestro progreso. Tampoco quiero confundirte: las ventas son necesarias. No digo lo contrario. Pero son solo un escalón hacia el verdadero progreso.

Pero en los peores casos, se trata de “métricas de vanidad" que son peligrosas. Si bien nos permiten quedar bien con nuestros amigos y colegas, nos distraen de la construcción de un negocio sano, exitoso y sostenible.

Esto lleva a muchos empresarios a poner mal el foco. Terminan centrándose en las tareas equivocadas para aumentar una métrica de vanidad que no es para nada relevante. Desperdician tiempo, energía, dinero, recursos económicos y capital humano en temas que no son esenciales para determinar las ganancias de un negocio.

Cuando una empresa se centra en el ego, en las métricas de vanidad, lo creas o no, en general terminan cerrando sus puertas. Sí, es posible “crecer hacia la quiebra”.

Hay empresas por ahí con una lista de mails de un millón de personas que nunca responden y mucho menos compran. Empresas a las que les hicieron muchísimas notas en revistas por su "crecimiento rápido", pero al poco tiempo quebraron.

Entonces te preguntarás… “¿Dónde debo poner mi atención?”

Cuando de negocios se trata, es fundamental enfocarnos en lo que realmente importa para impulsar nuestra empresa. Esta variable es la rentabilidad. Destiná tu foco, energía y recursos en tomar decisiones rentables. Es decir, planificar objetivos (y las correspondientes acciones para alcanzarlos) donde las ganancias sean mayores a lo que invertís para lograrlos.

Crecer perdiendo dinero es una mala decisión.