¿Tu empresa empezó a generar ganancias?

¿Tu empresa empezó a generar ganancias?

En uno de los artículos, hablamos del sueldo del emprendedor. También definimos que debe ser pagado cada mes y que, idealmente, el dueño es el empleado mejor pago. Pero... ¿Qué hacemos si de repente un mes hay más dinero en la empresa del que habíamos imaginado? Es decir, nuestra empresa nos deja ganancias.

Es común ilusionarse y empezar a pensar en cómo vamos a disfrutarlo, pero ¡ojo! Porque ese dinero ni deberíamos mirarlo, pues es dinero de la empresa. Deberíamos hacer de cuenta que ese dinero no es nuestro y, por lo tanto, evitar utilizarlo para gastos personales.

Aprendamos del accionar de las grandes empresas.

En las sociedades, dónde suele haber varios socios, el dinero que le queda a la empresa, tras pagar sueldos y otros gastos, es tema de debate. 

Los accionistas, o los socios, conversan sobre si distribuirlo entre ellos o si dejarlo en la empresa para futuras inversiones, mantenimientos o como fondos de reserva. No se distribuye instantáneamente por el simple hecho de estar allí.

Si a tu negocio le sobra dinero, acostumbrate a no usarlo instantáneamente. Incluso podés decidir invertirlo, a nombre de la empresa, para saber que tenés ese dinero trabajando para vos (generando intereses o un retorno económico de alguna forma). El día que lo necesites para comprar una nueva maquinaria o computadora para seguir creciendo, por ejemplo, tendrás esos fondos de reserva disponibles.

Es fundamental que mantengas las cuentas de tu empresa, aunque vivas de tu negocio, separadas por completo de tus cuentas personales. Que no mezcles los gastos de una y de otra.

Si, por ejemplo, tenés internet y celular, quizás decidas que paguen 50% la empresa y 50% lo pagás vos. Inclusive podés asignarle a la empresa un 10 o 20% del alquiler que pagas para vivir porque estás destinando un espacio para tu empresa, pero siempre siendo claro y justo. Sin manipular los números.

Esto va mucho más allá de mantener los números en orden…

Llevar un registro de los números de tu negocio, pagarte un sueldo y evitar mezclar las finanzas personales con las empresariales, te permitirá:

• Llevar el estilo de vida que deseas sin culpa porque vas a tener tu sueldo para destinar a eso.
• Vas a disfrutar de tu trabajo sabiendo que tenés un fondo para realizar inversiones que impulsen tu crecimiento.
• Vas a ocuparte de tus responsabilidades con la tranquilidad de que ese fondo puede cubrir imprevistos que puedan surgir.
• Si tenés socios, vas a evitar conflictos con ellos.

Los beneficios de mantener tus números ordenados son infinitos. Pero lo podemos resumir en una simple frase: vas a dormir tranquilo.

Por eso, pagate un sueldo y evitá tocar el dinero de tu empresa para gastos personales. Si lo ves lejano, trazá un plan para alcanzarlo.